Además de mudarse o viajar al extranjero, los motivos habituales para cambiar divisas incluyen el pago de hipotecas, la financiación de la educación de un hijo o la preparación para la jubilación en el extranjero.
Pero las monedas se intercambian en una escala mucho mayor por otras razones, incluido el comercio (compra de bienes y servicios de otro país) y la inversión.
El valor creciente de la moneda de un país frente a otros puede ser un indicador de una mejora de la salud económica. O al menos la perspectiva de ello. Si la libra esterlina está subiendo frente al dólar, por ejemplo, tendrá una mayor demanda en ese momento.
donde cambiar dolares a euros