Es un arbusto muy ramificado, procedente de China. La reproducción es muy fácil por estaca, preferentemente en primavera. Soporta temperaturas en torno a los 0 grados o incluso menos si el ambiente es seco, aunque prefiere una media entre 15 a 18 grados en invierno y no menos de 18 en verano. Necesita luz, el sol en las principales horas del día en verano limita su crecimiento, pero lo robustece. Rocía diariamente la copa con agua y ponlo en un lugar muy iluminado. Si se desarrollan chupones de la raíz quítaselos, pues limitan mucho a la planta. En primavera abónalo con productos especiales para bonsáis, no te pases, sigue las instrucciones o se estropeará. La poda la puedes hacer en cualquier época, pero mejor en primavera. El trasplante se hace siempre en primavera, en abril o mayo, reduciendo las raíces (cortarlas con unas tijera muy afiladas un poco). En cuanto a la tierra tiene que tener un buen drenaje, no estancar agua (se podrían pudrir las raíces), ha de ser rica. Por lo que se refiere a parásitos, ten cuidado en verano de rociar la copa todos los días con agua y de tenerlo en lugar luminoso, para evitar así, el ataque de araña roja. Por último, en cuanto al riego es una especie algo complicada, pues la tierra no se tiene que secar, pero tampoco estar húmeda durante mucho tiempo. Suerte y bienvenida al fascinante mundo de los bonsáis.
Por Milagros Ruiz (Valdemoro)